NORIAS DE AGUA (6ª PARTE)

NORIAS DE NUESTRO ENTORNO MÁS CERCANO (IV)

Continuamos nuestro recorrido por las norias de nuestro entorno. Seguimos el curso del río, dejamos el Portalejo y las Huertas Nuevas y nos detenemos en las Huertas de la Manga.

Huertas de la Manga: Término de Badolatosa, situada en el margen izquierdo, había una noria. Sus muros y vecinos que la usaron dan fe de su existencia. Vivían unas treinta familias, con un total aproximado de 200 habitantes. La noria regaba las fértiles huertas de su ribera.


Las piedras para hacer la “ZUA” las llevaban con una barca, debido al difícil acceso por tierra. El eje de la noria lo ponían en unos cilindros de madera llamados “colchones”, con su ranura ya dispuesta. Así nos lo cuenta el amigo Julio Romero Ruiz, que vivía en las huertas cuando la noria estaba funcionando y que sigue viviendo en ellas, siendo la persona de más edad, en la actualidad. En el año 1917, una riada se llevó la noria, que era de hierro y madera, y fue sustituida por una nueva. En otra riada casi se vuelca, pero resistió y ya estuvo hasta el final de su existencia. 

El 19 de enero de 1929 la compañía Sevillana de Electricidad, responsable del suministro de agua por aquel tiempo bajo contrato notarial, se comprometió a dar agua a perpetuidad al inutilizar la noria. Este compromiso lo heredó después la compañía eléctrica El Chorro, cuando construyó el Embalse de Malpasillo. Años más tarde la compañía Sevillana de Electricidad volvió a hacerse cargo del suministro del agua. Ésta intentó revocar el acuerdo que ella misma había firmado alegando el perjuicio que estas concesiones ocasionaban a sus aprovechamientos hidroeléctricos. 

Pero los hortelanos, hombres y mujeres duros para el trabajo, pero también para sus derechos, con el alcalde de las huertas por aquel tiempo, Manuel Pino Pineda, de apodo "polillo" a la cabeza se defendieron muy bien, alegando que era un derecho adquirido desde tiempo inmemorial.

El 1 de febrero de 1965 la justicia les dio la razón. Cuando la actual compañía eléctrica Endesa se hizo cargo del suministro del agua, heredó también el compromiso firmado anteriormente. En la actualidad dicho acuerdo sigue vigente, gracias a aquellos hombres y mujeres que defendieron los derechos, que en su día quedaron escritos y firmados para el bien de la comunidad de regantes. 

Esta noria estuvo en activo hasta la inauguración del Embalse de Malpasillo, en el año 1951. Siendo desmontada para sacarle algunos dinerillos. A partir de aquí la compañía concesionaria por aquellos años, hidroeléctrica El Chorro, instaló un motor  de bombeo. Desde el año 1990, el agua viene por una tubería desde el mencionado embalse. 

Unos trescientos treinta metros más abajo, en la huerta de la familia Ruiz Romero, margen izquierdo, en la riada producida en Febrero del año 1963, quedaron al descubierto unos muros antiguos y unas estacas clavadas de madera. Estos restos podrían ser de una noria antigua, molino harinero o para cualquier otro menester. En la actualidad y debido a la vegetación existente, dichos muros están ocultos y no hay rastro de los mismos. Actualmente el número de habitantes de las huertas se ha reducido a la mitad, 105 personas. Como dato curioso hay más viviendas pero vive mucha menos gente que antes.  

       
       
 





(Foto Adrián Ruiz: Vista General de las Huertas de la Manga desde el Arroyo “El Alcaparrero”)

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